Una vez que tengas clara la idea, prepárate para que lo que te digan los demás te entre por un oído y te salga por el otro. Vas a tener muchas madres, suegras, hermanas, cuñadas, amigas… y una larga lista que lenguas viperinas que te van a decir cómo tienes que hacer las cosas, que “¿cómo se te ocurre?” y que “de toda la vida las cosas se han hecho así”.
Lo más seguro es que tu boda la pagues tú, así que haz lo que quieras Clic para tuitear
Pero, ¿sabes qué? Eres única y todo lo que haces debe ser único y especial.
Total, lo más seguro es que tu boda la pagues tú, así que haz lo que quieras.
Consejos prácticos para empezar a organizar una boda
Me alegro de que hayas llegado hasta aquí. Probablemente sigas perdida pero ya sabes lo que quieres o al menos tienes el concepto de novia que quieres ser. Ahora toca pensar en lo siguiente:
El presupuesto de la boda
Llegados a este punto empecemos por lo más importante o al menos lo más determinante… la pasta. Que está muy bien que quieras hacer tu entrada en una carroza tirada por caballos blancos, pero… ¿lo puedes pagar?
Debéis fijaros un presupuesto total para la boda que incluya además del alquiler del espacio, el catering y la barra libre, otros factores como la luna de miel, la decoración y la ropa que vais a lucir el día de la boda. Tened en cuenta que por norma general el presupuesto inicial suele verse incrementado en un 20% de lo que habíamos establecido inicialmente, así que dejad margen para imprevistos.
No te vuelvas loca en Pinterest antes de saber lo que cuestan esos decorados.
Elaborad una lista de prioridades
Sentaos y haced una lista de cosas que no pueden faltar y el orden de importancia que tienen para vosotros.
¿Qué es lo más importante? Quizás para ti sea la gastronomía y no puedas renunciar a un menú de cuatro o cinco platos, o puede que sea la decoración del espacio y lo que más deseas es una ceremonia que parezca sacada de la saga Crepúsculo. También puede que te dé igual comer en un plato de plástico mientras lleves el vestido de novia de tus sueños que te ha costado un riñón y parte del otro.
No hay fórmulas perfectas, depende enteramente de vosotros, pero es importante que lo consensuéis.
Imagen vía twilightgirlportland.com
La fecha de la boda
Es muy, muy importante que una vez elegida la fecha para la boda hagáis una búsqueda de los eventos que puedan coincidir.
Si os casáis fuera de vuestro lugar de residencia informaos de las fiestas locales y aseguraos que no hay eventos importantes, como la final de la Champions, la cabalgata de carnavales o similares.
Estoy segura que no quieres a la mitad de tus invitados más pendientes del partido que de ti, o que no se pueda llegar al evento porque las calles estén cortadas por las fiestas.
La lista de invitados a la boda
Lo primero que os preguntarán cuando entréis a ver un espacio, después de la fecha, es cuántos invitados tenéis, así que antes de empezar a buscar debéis definir esto. Es imposible que tengáis la lista exacta, pero al menos un estimado, tirando a lo alto. Este factor va a ser determinante para saber cuánto podéis gastar por comensal. De esta manera podéis descartar sitios, ya sea por precio de menú o por aforo.
¿Tienes tiempo para organizar una boda?
La organización de cualquier evento puede ser muy estresante. Recordad que estamos trabajando con personas, por lo que va a haber imprevistos. No intentes luchar contra ello, acéptalo.
No será fácil que te atiendan en los espacios fuera del horario laboral. Puede que te cambien las citas a última hora, que no sea tan fácil traer el vino que quieres, o que de repente te informen que las flores que quedaban de muerte para el decorado que has visto en Internet no están disponibles para esa fecha.
¿Te ves capaz de lidiar con todo sin morir en el intento?
Y ni hablar de la organización del día de la boda.
Quizás te hayas hecho un esquema mental del orden de la ceremonia, de por dónde han de entrar los invitados, del momento exacto en que tiene que sonar una canción, etc. Sí, genial. ¿Y quién coordina todo eso?
De la misma manera que asumimos que tenemos que contratar un fotógrafo con el consiguiente coste, mi consejo es que contratéis un organizador de bodas profesional (wedding planner) para que os ayude con todo esto.
Su trabajo será conseguir una boda a tu gusto dentro de tu presupuesto y siempre va a velar por vosotros frente a los proveedores.
Espero que esta pequeña guía te sirva para arrancar, así que poneos manos a la obra y ¡a organizar una boda!